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| Otto con la camiseta del Villero |
En la apertura de una nueva fecha de la Primera C,
el Villero consiguió una importante victoria ante Fenix por 4 a 2. Entre los
goleadores se anotó el chosmalense, que selló el resultado final. Su club debe
sumar puntos para escapar del descenso pero la buena campaña lo convirtió en
uno de los animadores y se encuentra en el lote de los que pelean por ascender.
Fue un vibrante encuentro que comenzó con derrota,
pero tras un centro de David Oltolina a la cabeza de Eugenio Peralta Cabrera su
equipo consiguió el empate. El autor del tanto es un conocido goleador de las
divisiones del ascenso y actualmente lidera la tabla de anotadores. Sacachispas
volvió a quedar abajo en el marcador, pero apareció Maximliano Chanchi Estévez
para dar vuelta el partido.
Fénix fue en búsqueda de la igualdad y se encontró
con otro gol en su valla. Maxi Estévez se escapó por derecha y cedió al medio
para la entrada del chosmalense que enfrentó al arquero y no perdonó, definió
cruzado y salió a festejar con sus compañeros en el minuto 91 de juego. Un importante
triunfo que lo aleja del fantasma del descenso y a la vez lo pone en la pelea
entre los de arriba. Tras el pitazo final hubo incidentes entre los jugadores y
cuerpos técnicos, el Chanchi Estévez fue uno de los que más golpes recibió,
Oltolina intentó separar a sus compañeros.
David llego a Mercado Central Sacachispas FC en la
presente temporada, junto a varios refuerzos con el objetivo de no descender y
poco a poco se ubicaron entre los punteros. Según “Pasión Lila” una página que
sigue de cerca al club del barrio porteño de Villa Soldati, el volante chosmalense
estuvo presente en 25 partidos, solo se ausentó en uno por culpa de una contractura
que lo dejó afuera. Disputó 2.095 minutos con la camiseta del Lila, recibió
tres amarillas y convirtió cuatro goles, contando el último ante Fénix.
El volante zurdo nació el 22 de marzo de 1985 en
Chos Malal y en unos días más cumplirá 28 años. En el 2000 con 14 de edad se
fue a vivir a Villa Elisa, una localidad cercana a La Plata, en busca de
cumplir su sueño de ser futbolista. Después de varias idas y vueltas se cayó su
llegada a Gimnasia y recaló en Defensores de Cambaceres, allí inició su
trayectoria en las divisiones inferiores. También pasó por Independiente de
Avellaneda y Nueva Chicago, el Torito de Mataderos.
En el verdinegro tuvo un buen paso, donde llegó a
practicar con el primer equipo cuando Néstor Pipo Gorosito era el director
técnico. Pero volvió al Rojo de Ensenada y allí se haría realidad ese sueño de
debutar en primera, en mayo de 2005. Hasta 2008 fue uno de los pilares del
Camba, se adueñó de la camiseta número 11 y se ganó el apodo de Bruja; estuvo
presente en las finales de las promociones en las que su equipo se mantuvo en
la Primera B Metropolitana.
Su trayectoria continuó en Berazategui, club que
milita en la Primera C del ascenso argentino. En el conjunto Naranja jugó
cuatro temporadas, con buena repercusión en la hinchada que le mostró su
afecto. Tuvo un breve paso en 2010 por Ferrocarril Midland pero regresó a Bera,
donde se quedó hasta que fue transferido a Sacachispas.
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